La última noche…

La última noche en que nos abrazamos todavía la recuerdo.

Yacía tendida, repleta de ti.

Palpitaba mi corazón con los sonidos de tu alma.

Cada latido me dolía más que el anterior, como presagio de que

-al menos durante muchísimo tiempo-

sería la última vez que estaríamos  abrazados así…

Yo en ti.

Tú en mí.

Todavía pienso en esa noche y siento el mismo suspiro ahogado y lastimante.

Besos de calidad dolorosa…

Caricias marcadas de resignación agonizante…

¿Por qué dar la espalda ahora que el amor brilla?

¿Qué tiene de ofensivo dejar salir lo que se siente?

¡Los seres humanos tantas veces nos ofuscamos en absurdos juegos de poder!

¡Queremos sentir, pero pretendiendo ante el mundo  que no lo hacemos!

¡Queremos vivir y palpitar mientras fingimos un corazón frío!

Te amo tanto, que aún duele recordar esa última noche en que estuvimos abrazados…

Esa última noche en que mi alma susurró tu nombre y mi corazón cantó contigo.

About Ella Milmundos

Hay quien escribe por gusto... Yo escribo por necesidad. Escribir es mi desahogo; escribiendo le doy rienda suelta a mi alma, para que vuele y se revele... Entre letras, palabras e imágenes me siento en paz. Mas debo decir que, si bien escribo primariamente para dejar salir mis sentimientos, también escribo por la responsabilidad de ponerle palabras a los sentimientos de muchas otras personas... Mi espíritu entiende que estos sentimientos, aunque son míos, también son propiedad de un alma colectiva que se busca a sí misma en mí y en todos. Por todas esas personas que no saben cómo expresasr lo que sienten, lo que calladamente llevan dentro, existen montones de poetas locos, como yo, que cantan su verdad de tantas y tan variadas maneras como diversa es la realidad humana. Sí. Soy una mujer. Pero más allá de cualquier limitación de género, soy lo mismo que tú: un Ser Humano. Es por eso que te digo que soy yo, pero también soy muchos y muchas. Soy todos y todas. Soy yo y soy tú. Y hoy abro este espacio para que lo compartamos. Si lo que aquí escribo, de alguna manera encuentra eco en ti, anímate y compártelo... Ya verás que no hay soledad cuando de contar sentimientos se trata.
Esta entrada fue publicada en Amor, Hombre/Mujer, Relaciones Humanas. Guarda el enlace permanente.

Deja un comentario